El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, calificó a su aliado Charlie Kirk como un “mártir de la verdad” tras su asesinato ocurrido este miércoles en un evento público en la Utah Valley University y acusó a la “izquierda radical” de fomentar un clima que habría contribuido a la muerte del activista y prometió una ofensiva contra los responsables.
Kirk, cofundador del movimiento Turning Point USA, se encontraba participando en una sesión de preguntas y respuestas frente a cientos de asistentes cuando se escuchó un disparo.
El activista cayó de su silla tras ser impactado en el cuello, causando el pánico entre el público.
La policía local informó que el disparo habría provenido del techo del campus y que un sospechoso vestido de negro fue captado por cámaras de seguridad.
El jefe de policía de la universidad, Jeff Long, indicó que alrededor de 3 mil personas se encontraban en el campus en el momento del ataque.
Testimonios de asistentes señalan que Kirk recibió un disparo en el cuello, lo que provocó su desplome inmediato.
Autoridades de Utah consideran el caso como un asesinato dirigido y mantienen investigaciones en curso para localizar al responsable.
Charlie Kirk había ganado notoriedad desde 2012 con la fundación de Turning Point USA, organización dedicada a promover ideas conservadoras entre jóvenes universitarios.
Su influencia en este sector se convirtió en un activo político para Donald Trump, quien destacó el papel del activista en la movilización juvenil que respaldó su regreso a la Casa Blanca.
El ataque provocó reacciones de líderes políticos de diversos partidos.
El gobernador de Utah, Spencer Cox, lo calificó como un asesinato político, mientras que el expresidente Joe Biden y la exvicepresidenta Kamala Harris condenaron la violencia.
Trump ordenó que las banderas en edificios federales ondeen a media asta hasta el domingo como señal de duelo nacional.
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